lunes, 16 de mayo de 2016
lunes, 9 de mayo de 2016
Los vecinos mueren en las novelas
Este libro fue escrito por Sergio Aguirre, nacido en Córdoba en 1961, creador también de La venganza de la vaca y de El misterio de Crantock, Desde su niñez sintió una atracción por la lecturapero, a pesar de haber escrito su primer cuento a los doce años, él asegura que no se consideró escritor hasta la edad de 48.
Como psicólogo, estuvo a cargo de la coordinación del Taller Literario del Hospital Neuropsiquiátrico de Córdoba.
Una de sus obras más reconocidas, Los vecinos mueren en las novelas, fue adaptada para teatro.
En los planes de estudio de colegios de varios países latinoamericanos figuran sus libros como parte del material de lectura obligatorio.
Una vez más Aguirre nos captura con sus “idas y venidas” entre varias historias, desafiando la realidad que atribuye el lector en conjunto con pistas y situaciones que al irse revelando aumentan la intriga y nos adhieren más al libro.
En esta historia, situada quien sabe cuándo en Inglaterra, un escritor, quien se muda con su esposa a una casa en el campo, en las afueras de Chipping Champden, al encontrarse en un momento de soledad decide presentare con los vecinos, hábito inculcado desde pequeño por sus padres.
La diferencia es que esta vez no será igual, su vecina, la señora Greenwold, parecía ser una aficionada a la literatura, más precisamente a la de suspenso. Se pasan la tarde contando posibles historias que hasta la última página no sabremos cuáles son ficción y cuáles realidad.
Como psicólogo, estuvo a cargo de la coordinación del Taller Literario del Hospital Neuropsiquiátrico de Córdoba.
Una de sus obras más reconocidas, Los vecinos mueren en las novelas, fue adaptada para teatro.
En los planes de estudio de colegios de varios países latinoamericanos figuran sus libros como parte del material de lectura obligatorio.
Una vez más Aguirre nos captura con sus “idas y venidas” entre varias historias, desafiando la realidad que atribuye el lector en conjunto con pistas y situaciones que al irse revelando aumentan la intriga y nos adhieren más al libro.
En esta historia, situada quien sabe cuándo en Inglaterra, un escritor, quien se muda con su esposa a una casa en el campo, en las afueras de Chipping Champden, al encontrarse en un momento de soledad decide presentare con los vecinos, hábito inculcado desde pequeño por sus padres.
La diferencia es que esta vez no será igual, su vecina, la señora Greenwold, parecía ser una aficionada a la literatura, más precisamente a la de suspenso. Se pasan la tarde contando posibles historias que hasta la última página no sabremos cuáles son ficción y cuáles realidad.
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